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martes, 14 de junio de 2016


LAS HORAS PÁLIDAS

Fueron los días de horas verdes
y estábamos tan llenos de energía
Tan ocupados
tan llenos de asilvestrada utopía

Parloteabas de colores
de sabores y olores llenos de fragancia
Pero a veces entre tus pestañas
vacilaban tus pupilas
al sentir un leve palpitar de la nada

Yo te decía
No tengas miedo amor mío
no llores por los instantes severos
que se nos escapan entre los dedos
Llegarán los dias de las horas pálidas
tranquilas y sosegadas
y sentiras como tuyo cada momento

Llegaron las horas rojas
ardientes las manos como fuego
Las palabras como llamas
incendiando la plenitud de la espiga
cuando revienta de versos

Pero a veces en tus ojos
asomaba la lluvia de húmedas perlas
Ese agua impaciente
que no se quedaba entre los dedos

Volví a pedirte
que no tuvieras miedo
Que en los días de las horas pálidas
el sentimiento quedaba tan desnudo
que nada era disimulo
Que el amor tenia un color y aroma
tan simples como la verdad
Que el corazón
ya solo latirá por el embrujo
de saber que a un paso queda lo eterno

(José M. Huete García. Junio 2016)
D.A.R

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